Los niños crecen, van cambiando y, con el paso del tiempo, necesitan dejar atrás la decoración infantil para disponer de un espacio propio más adaptado a sus gustos y su nueva etapa vital.
Dar una vuelta a la imagen del dormitorio se convierte en algo indispensable, así como el cambio del mobiliario hacia elementos que favorezcan el estudio o que faciliten el almacenaje de elementos que ya no son juguetes. La clave está en optimizar la habitación, disponer de zona para el descanso y el estudio y buscar una buena distribución para hacer de ese espacio algo único y personal.
Una cama grande que también haga funciones de sofá, de espacio para descansar y poder ver series y relajarse... ¡fundamental! Para dar el toque diferente, hay que elegir un edredón en tonos con los que el joven se identifique o con un estampado que le guste. Hoy en día existen tejidos de estampación digital espectaculares con los que se pueden hacer colchas, boutis o edredones que le entusiasmarán.
Y es que los textiles de la habitación (cortinas, visillos, ropa de cama, fundas de cojines...) son los elementos clave para ese aspecto juvenil que necesitan los adolescentes. Sustituyendo la decoración textil infantil por otra más juvenil es fácil darle una vuelta completa al aspecto del dormitorio sin tener que invertir mucho dinero.
En combinación con la ropa de la cama, continuamos con las cortinas. Elegir su tonalidad, su estilo, y su estampado favorito para que se sientan cómodos en un espacio que se convierte en su reino. Algunos jóvenes optan por los ambientes más modernos, otros se van hacia el romanticismo, algunos apuestan por el enfoque 'videojuegos' o por lo retro y otros muchos optan por los colores neutros o los tonos oscuros. Las opciones para elegir son infinitas.
La decoración en tonos pastel, como ya vimos hace unas semanas, está en absoluta tendencia: por un lado, aporta luminosidad y por otro, un toque decorativo inconfundible sin agobiar o cansar, que es algo fundamental. Son tonos que, además, favorecen una imagen más amplia de las habitaciones. Si el dormitorio del joven en cuestión es pequeño se puede optar por este tipo de colores o, si no es de su gusto, favorecer que la ventana esté despejada al máximo. Facilitar la iluminación natural todo lo que se pueda hace que la habitación parezca más grande y sea más confortable. Conjugar esto con la necesaria privacidad de los jóvenes es fácil si se eligen estores o visillos en colores claros.
Para completar el look en cuanto a color y estilo, quizá haga falta repintar alguna pared o paredes de la estancia. También están en plena tendencia los papeles pintados, por lo que cambiar el estilo de una habitación para pasar de la decoración infantil a una juvenil es posible con acciones que no llevan demasiado tiempo ni implican una reforma demasiado grande.
Mira en la foto siguiente qué resultado tan alegre queda con este tejido de estampación digital de C2 Home Decor que ha realizado para una habitación juvenil Fashion Home Lhogary.
La distribución en las habitaciones juveniles normalmente debe cambiar porque las necesidades y los gustos también lo hacen. Es importante que el joven tenga una mesa bien ubicada y despejada para estudiar y para almacenar todas sus cosas. Aunque el orden no conjuga demasiado con algunas edades, hay que ponérselo fácil para que no resulte una lucha sin cuartel: estanterías, cajones y armarios bien organizados por dentro para que la habitación no desaparezca bajo todos los elementos del día a día.